Te doy la bienvenida, persona curiosa.
No estoy muy segura de qué decir en este espacio, principalmente porque supongo que la gente que va a llegar a esta página son quienes me conocen pero la idea es que no sea así, que eventualmente pueda llegar a otros lugares, la internet tiene esa magia de ser tan grande y pequeña a la vez.
Algunos dirían que ya estoy vieja, otros que recién empieza lo bueno, nací el 9 de enero de 1989, saque la cuenta y luego me dice qué opina. Algo aparte del cuándo es el dónde nací: nacida en Santiago de Chile, pasé mi infancia ahí y luego me cambié al norte, Tercera Región, luego al sur, Octava Región, que para muchos no es ni tan al norte ni al sur pero bueno, luego volví a Santiago y no me quedé ahí, 2007 sería el año en que me mudo a Buenos Aires, Argentina. Porteña de segundo gentilicio, no de Valparaíso, del Atlántico. Y acá estoy desde entonces.
Las mudanzas podrían ser un vaticinio a lo que después fue mi escolaridad porque me quedé con el bichito de cambiar y así fue en los estudios superiores. Primero me dio por el diseño gráfico, basta con ver la página para ver que eso no dió muchos frutos, entonces luego de una pausa me cambié a estudiar Filosofía, cosa que me sigue gustando y quizás algún día vuelva pero no era el momento, otra pausa y me puse a estudiar Robótica. De eso si me recibí. El plotwist es que me gusta desarmar robotitos más que armarlos, y armar otras cosas con lo que encuentro, entonces entre la robótica y el diseño sale el proyecto Graypeace ¿y la filosofía? está en todo, no pregunte pavadas que no me aguanto de responderlas.
Así que le puedo servir mate, té o café para que sigamos conversando, o en este caso para que siga leyendo que, espero, hayan un par de entradas en el blog. Cualquier cosa abajo me encuentra en redes sociales, me encantan esas tonteras, no voy a mentir. Me quedé con la duda de con qué tono empecé a escribir esto, quizás ya no tiene sentido que sea tan cercana la forma de escribir pero releerse es para perdedores. Excepto cuando lo hago, ahí es de gente capa.
Fily.
PD: Ah!, sí, mi nombre real es Bárbara, estoy acostumbrada a que me digan Fily por internet. Que sea a su gusto, como la cantidad de azúcar en su bebida.